Este 2024 la Iglesia Luterana Costarricense mediante el Albergue Bethlehem continúa siendo una casa que brinda refugio a personas que transitan construyendo el buen vivir. Es un lugar donde se nutre la esperanza.
Dios conoce lo más profundo de nuestro ser (Salmo 139:14), él está con las personas en movilidad humana, en su dolor, incertidumbre y esperanza. Todo cambia, pero la presencia solidaria y empática de Dios es eterna.La Iglesia que es guiada por el Espíritu asume los acontecimientos de la vida cotidiana de las familias refugiadas con sensibilidad humana y profunda espiritualidad liberadora. El amor y la justicia son alimentadas cuando creamos espacios de encuentro, acogida y promoción humana.
En el encuentro con las personas que demandan nuestra ayuda está presente Cristo. Jesucristo el liberador nos enseña a a estar disponibles para tender la mano. Dejarnos transformar y enriquecer por el rostro humano del otro y la otra. Gracias al apoyo de muchas personas, principalmente a HIAS-ACNUR, el Albergue continuará respaldando a muchas personas migrantes en este 2024. Felicitamos a quienes han gestado con mucho esfuerzo y ternura este proyecto desde su fundación.
En esta nueva etapa del Albergue Bethlehem el empeño de Luis Florez, Carlos Bonilla, Melvin Jiménez, entre otras personas, ha permitido que esta casa de acogida continúe viva. El aporte de Ana Luisa Navarro, Trabajadora Social y de Keller Araya, Monitor del Albergue, bajo la coordinación de Luis Florez, ha sido fundamental para el buen desarrollo de este Proyecto.
Esperamos sumar a más personas y organizaciones para la sostenibilidad de este proyecto. Los nuevos murales del edificio de ILCO no solamente engalanan este lugar de esperanza, expresan los principios que nos guían: inclusión, hospitalidad, justicia, comensalidad, interculturalidad, y respeto a la diversidad, etcétera.
¡El arte y la comunión nos motivan a fortalecer nuestra misión integral!